México las adoptó y les puso un toque de carácter religioso es
decir la iglesia católica participaba dado el hecho de que las ferias se
dedicaban en honor de los Santos Patronos de la población que las organizaba.
En el periodo de la colonia no hay antecedentes de las ferias en
Iguala, de la primera feria organizada en la ciudad es celebrada durante la
etapa independiente en el año de 1835, siendo Presidente de la República Miguel
Barragán y el gobernador del estado de México Manuel Diez de Bonilla quienes
firman el decreto No. 482, en el que se le da el grado de Ciudad de
Iguala agregándole de Iturbide, concediendo además
una feria por diez años dedicada A San Francisco de Asís, patrono de la
naciente ciudad del 4 al 10 de octubre de cada año.
En el año de 1849 se erige el estado de GUERRERO y la ciudad de
Iguala es nombrada CAPITAL del estado, en diciembre de 1851 dos años después se
organizó una feria en honor del recién nacido ESTADO.
Este evento se anunció en el diario capitalino El siglo XIX y se
decía que habría peleas de gallos, corridas de toros, bailes y todo lo
que conlleva a una feria iniciándose el 24 de diciembre.
El primer gobernante del estado de Guerrero fue Juan N. Álvarez.
En la época de Porfirio Díaz no hay noticias de ferias en Iguala,
si las hubo no tuvieron trascendencia, con mucha algarabía se celebró el primer centenario de
la plantación de los 32 tamarindos, en el zócalo de la Ciudad ; en el año de
1932 mismos que fueron plantados por el igualteco Luís Gonzaga Vieyra cien años
antes, el producto de los 32 tamarindos serviría para mantener a la escuela del
pueblo sin imaginarse que estos árboles servirían como uno de los distintivos
de la ciudad de Iguala.
Durante el evento que duro 8 días se hizo la invitación extensiva
a todo el estado de Guerrero para elegir a la mujer más hermosa, que sería la
reina de la ciudad de Iguala de los tamarindos.
En nuestra ciudad se hizo una selección, saliendo electa la
Señorita Mercedes Rueda Sevilla quien era muy guapa con un cuerpo perfecto,
pero muda, hija del Sr. Francisco Rueda Bravo y de la Sra. Amelia Sevilla de
Rueda.
Como el motivo era la celebración del centenario de la plantación
de los 32 tamarindos se invitó un padrino para cada uno de ellos, éstos fueron
adornados como arbolitos navideños con muchas luces que por aquellos tiempos
eran novedad ya que tenía muy poco tiempo de funcionar la luz eléctrica.
Para cerrar el evento se citaron a las 32 bellezas del estado y
seleccionar a la reina y para sorpresa de todos y de Iguala quien ganó fue la
señorita Mercedes Rueda Sevilla, la reina hermosa pero muda.
Se cuenta que el público gritaba ¡que hable!, ¡que hable! Pero
ésta nunca habló, solo lució su belleza y su elegancia.
El trono donde fue coronada la reina de la ciudad de Iguala de los
tamarindos fue colocada en un solar frente al viejo palacio municipal donde hoy
esta ubicado el Hemiciclo a Juárez.
Durante este evento asistió el Lic. Donato Miranda Fonseca a la
inauguración y coronación de la reina, se develó un monumento al Gral. Luís
Gonzaga Vieyra.
En el año de 1938 el Sr. Rafael Gama Núñez fundó y dirigió
un patronato pro Día de la Bandera logrando que el 24 de febrero se declarará
el Día de la Bandera.
Los igualtecos solicitaron se construyera un Monumento el se logró
a las gestiones que hizo el Gobernador interino Gral. Carlos F. Carranco y el
presidente de la República, Gral. Manuel Ávila Camacho. Se logró la
construcción del monumento siendo inaugurado el 28 de septiembre de 1942.
En el año de 1953 se organizó la primera Feria a la Bandera, el
primer evento fue organizado por el dentista Héctor Moreno, quien promovió
también la elección de la Reina a la Bandera.
La primera Reina a la Bandera resultó ser la Señorita Guadalupe
Castañón Goñi.
La primera feria a la Bandera formalmente llamada así se
estableció en el atrio de la Parroquia de San Francisco de Asís y del Zócalo de
Iguala, en ese entonces ubicaron los juegos mecánicos en un solar en donde
promocionaban con espectacularidad la marca de una cerveza con un globo
inflable en forma de botella, lo causaba admiración de propios y visitantes, a
un costado de donde por muchos años estuvo una tienda de ropa llamada “La
Popular” hoy en día esta ubicada una panadería.
Las primeras ferias a la Bandera fueron celebradas en el centro de
la ciudad, pero se retiraron a principios de los años sesenta hacia la
periferia de lo que en ese tiempo era la ciudad, lugar donde ahora está
construido el I.M.S.S., un lugar lleno de huisaches, en las antes mencionadas
celebraciones destacó un personaje muy importante llamado Arturo Mastache.
Por necesidades propias del crecimiento de la feria, ésta tuvo que
ser ubicada en lugar propio y con las dimensiones requeridas, en ese tiempo se
cambió a lo que hoy ocupa la Unidad Deportiva y el Lienzo Charro.
El primer Presidente de la República que asistió y presidió el
desfile cívico militar fue Luís Echeverría Álvarez, participaron los
cadetes militares del Colegio Militar, éstos desfilaron con las urnas que
guardan las banderas originales que México ha tenido, aviones de la fuerza
aérea mexicana haciendo piruetas, la descarga de los 21 cañones; fueron hechos
que los ciudadanos Igualtecos y visitantes quedaron admirados.
Las ferias estuvieron en el área antes mencionada, después
alrededor del estadio “Ambrosio Figueroa” y del D.I.F. Municipal hasta que el
Gobernador José Francisco Ruiz Massieu cedió los terrenos de la Ciudad
Industrial y establecer definitivamente el espacio para la Feria a la Bandera
en Iguala.
Personaje importante del evento en ya sus propias instalaciones
fue el Prof. Jaime Rodríguez Realeño, al inicio del nuevo milenio la
importancia es para el Sr. Benjamín Domínguez quien mejoró las instalaciones y
con el beneficio económico propio de la feria construyó el Palenque de gallos,
el Teatro del Pueblo, un Zócalo y la estructura en la cual se muestran los
animales de la exposición ganadera de cada año.
FUENTE CONSULTADA: REVISTA DE HISTORIA, ARTE Y CULTURA DEL ESTADO DE GUERRERO REEVOLUCIÓN.
50 ANIVERSARIO DE LA FERIA A LA BANDERA 1953-2003. EDICIÓN ESPECIAL DE FERIAS.
NUMERO 9. FEBRERO DEL 2003. AÑO I. EDITORIAL YOALAN. IGUALA GUERRERO,
MÉXICO.